Esta recomendación es vital para que “los niños y adolescentes logren un rendimiento escolar óptimo”, aseguró Magdalena Parada Domínguez, coordinadora de Nutrición y Dietética del Seguro Social.
El lapso del desayuno a la comida es muy largo, por ello, los pequeños necesitan un lunch saludable para llevar a la escuela, cuyos componentes les proporcionen energía al cerebro y cuerpo; así como para alcanzar las funciones de su desarrollo físico y de aprendizaje.
Los niños que cursar la educación básica, requieren 1200 calorías al dpia, mientras que los adolescentes de 1600 a 2 mil kilocalorías, que pueden repartirse entre de cuatro a cinco porciones de comida.
El lunch más saludable para llevar a la escuela consiste en:
- 1 porción de fruta mediana o picada (o ½ taza de fruta picada)
- 100 gramos de verdura
- ½ sándwich con una rebanada de pan con queso, jamón de pavo o alguna otra proteína como atún.
- Agua simple (evitar el consumo de bebidas azucaradas o refrescos).
También puedes optar por sustituir el sándwich por tres galletas y el agua simple por una de frutas de temporada.
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