HAZLO UN ESTILO DE VIDA
Pensamos que una dieta se termina cuando ya nos queda la ropa, ¡pero no! El secreto para que nuestra figura perdure, es adoptar esta transformación como un estilo de vida. Desde respetar las horas de sueño y fijar un plan alimenticio, hasta ejercitarte 30 minutos al día y salir a relajar tu mente.
MANTENTE ACTIVA CON LO QUE TE MOTIVE
No importa si se trata de ir a correr con tu mascota o si haces yoga en casa, lo que vale es que mantengas tu organismo activo con una actividad que disfrutes. Te sugerimos practicar ejercicios con los que veas resultados que te inspiren, por ejemplo, las sentadillas definen fácilmente tus glúteos y te hacen lucir los jeans mucho más sexy.
COME ALIMENTOS QUE DISFRUTES, SIN EXCESOS
Los antojos son un arma de doble filo, nos satisfacen pero podemos perder el control de comerlos. La solución es darnos ese gusto con disciplina, por ejemplo: “Me encantan los pasteles pero mi propósito es no volver a tener pancita, así que me comeré solo una rebanada. Sé que me lo merezco y que podré compensarlo con un extra de ejercicio en la semana”.
TEN EN MENTE EL ESFUERZO QUE HA REQUERIDO
Recuerda que todo este proceso ha requerido un compromiso en tiempo, esfuerzo, actividades que has dejado de hacer (como los drinks con tus amigos) y el dinero que has invertido en tu salud y apariencia. Antes de querer tirar la toalla o atascarte de tus snacks favoritos, piensa que cuenta más la dedicación y el amor propio que te has demostrado.
NO SEAS MUY ESTRICTA, SÉ CONSTANTE
Hay veces que tendrás que salir a algún evento donde será imposible seguir tu dieta al pie de la letra y, ¡se vale! Ese día puedes cambiar el plan pero el resto de la semana debes continuar con tu evolución. Para que la rutina no te aburra, es fundamental que busques ejercicios nuevos y recetas diferentes cada dos meses.
Vía: Glamour.