Tipos de quemadura
El tipo de quemadura más común es la quemadura térmica, provocada por entrar en contacto con un alimento o líquido a muy altas temperaturas. También puede darse por entrar en contacto con objetos calientes como cucharas.
Quemaduras químicas
Algunos tratamientos o enjuagues bucales contienen clorhexidina, una sustancia que puede causar lesiones en la boca y el paladar. Lo mismo ocurre con medicamentos como la aspirina, y otras sustancias tales como la cocaína, el tabaco, los detergentes y los productos blanqueadores. Estas lesiones pueden presentarse en forma de quemaduras, aftas o ulceraciones.
Cuando sufres una quemadura bucal, lo mejor es actuar cuanto antes, siguiendo estos consejos.
Agua fría
Si acabas de quemarte el paladar, por ejemplo con una bebida muy caliente, lo primero se que recomienda hacer es beber agua fría.
Hielos
Ahora que si tienes hielos a la mano, lo mejor que puedes hacer es tomar uno y colocarlo con cuidado en la zona afectada. Esto evitará la inflamación y actuará como un anestésico natural. Si no tienes hielo puedes usar otros alimentos fríos como helado.
Gel de aloe vera
El aloe vera es excelente para tratar cualquier tipo de quemaduras, desde aquellas causadas por el sol hasta las quemaduras por cocinar o consumir alimentos muy calientes. Además de que su gel es muy refrescante, tiene propiedades analgésicas y antibióticas, evitando cualquier tipo de infección. En caso de quemadura, aplica un poco de gel de aloe directamente sobre la zona afectada y deja reposar unos minutos.
Leche
También se recomienda beber un poco de leche, de preferencia fría. Esta va a crear una capa protectora que disminuirá las molestias, aunque también puedes sustituirla por yogurt (de preferencia natural).
Manzanilla
Para el dolor crónico de quemaduras y aftas, lo mejor que puedes hacer es preparar un enjuague bucal de manzanilla, que desinflama, calma el dolor y promueve la cicatrización. Prepara un té de manzanilla y agrega 1 cdta de bicarbonato de sodio. Deja reposar hasta que se enfríe y utilízala 2 veces al día como enjuague bucal. Haz gárgaras durante 3-5 minutos y escupe el agua.
Si las molestias persisten al cabo de los días, lo más recomendable es que acudas al médico.
Importante: Nuestra intención es solamente ofrecer información de naturaleza general para ayudar en la búsqueda de desarrollo y crecimiento personal. Es recomendable que antes de seguir estos consejos, siempre consultes a tu médico de confianza.
Vía: Rebañando.