¿Qué tan peligroso es golpearse el vientre estando embarazada?

Estar embarazada es uno de los momentos más hermosos para una mujer. Sin embargo, también tiene algunos inconvenientes que las futuras mamás tienen que sortear. Pies hinchados, aumento de peso y cambios de humor son sólo algunas de las molestias de esta etapa.

Además de estas situaciones, hay algo que desafortunadamente es muy común en las últimas semanas: tropezarse y caer. Si esto te ha pasado no te sientas mal, pues definitivamente no eres la única.

Conforme avanza el embarazo y el vientre crece, las habilidades psicomotrices, la coordinación y el equilibrio disminuyen, pues el cuerpo tiene que adaptarse a su nuevo peso y tamaño. Esto ocasiona que el centro de gravedad se desplace hacia adelante (literalmente para que la ‘barriga’ no nos jale) y que sea un poco más complicado calcular nuestros movimientos. Si a eso le sumas el cansancio y que muchas veces no podemos ni ver nuestros pies, es comprensible que aumenten las posibilidades de un tropiezo.

Algo que parece tan simple como subir escaleras, caminar por la banqueta, andar sobre una alfombra o entrar a un elevador puede convertirse en todo un reto. Un pequeño descuido y los pies tropezarán, provocando que el cuerpo se precipite hacia el frente y lo primero que aterrice sea la ‘pancita’.

Aparte del susto y uno que otro raspón, lo primero que viene a la mente de las mujeres es si el bebé estará bien o si corre algún peligro por el golpe en el vientre. ¿Sentirá el impacto? ¿Le afectará el movimiento brusco?

Bien protegido


Aunque parezca muy vulnerable, en realidad el feto está protegido por el líquido amniótico, el útero y la pared abdominal. Gracias a la presencia de estas tres barreras, es poco probable que un simple golpe tenga repercusiones para el bebé. Dado que los músculos abdominales de la mamá y el líquido amniótico amortiguan el impacto, es difícil que el feto sufra una fractura o una herida si la mamá se golpea con el carrito del supermercado, con una puerta o tropieza en el jardín.

No obstante, si se trata de una accidente más grave -como un choque vehicular, caer por las escaleras, entre otros-, sí hay un riesgo latente de que el producto sufra daños. En este caso, es muy probable que el organismo produzca algunas señales de alarma.

¿Cuándo acudir al hospital?


Si presentas alguno de estos síntomas es mejor que acudas con el médico cuanto antes, para asegurarte de que todo esté bien contigo y el bebé, y revisar que ninguno de los dos corra peligro.

  • Sangrado vaginal. Esto puede ser indicador de un desprendimiento de placenta.
  • Dolor abdominal. Si te golpeaste el vientre, es normal que sientas un poco de dolor en la zona del impacto. No obstante, si este no disminuye al cabo de unos minutos y además empeora con el contacto, debes acudir al hospital.
  • Pérdida de líquido amniótico. Si el saco amniótico sufrió una fisura o está roto, habrá expulsión de líquido.
  • Contracciones. En algunos casos, pueden significar que el momento del parto se adelantó.
  • Inactividad del feto. Cada mamá conoce los movimientos de su bebé. Si percibes que se mueve por menos tiempo o con menor intensidad, avísale a tu doctor para que inicie un monitoreo de vigilancia.  


Por: VANESSA MENA.
Vía: iMUJER.


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