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Camina...
¿Sabías que si estacionas tu auto a 1 km de tu oficina y caminas para llegar puedes gastar un promedio de 800 calorías a la semana? Es muy efectivo y al cabo de dos meses notarás tus músculos más firmes.
¡Hola bicicleta!
Organiza a tu familia para montar en bicicleta una hora, un día a la semana y verás cómo pronto estarán en su peso ideal, además de que se van a divertir todos juntos.
Hora de activarte
Compra un par de pesas de una libra (alrededor de medio kilo) y cuando mires la televisión (sin dejar de disfrutar tu programa favorito) haz dos o tres sets de ejercicios para brazos y pecho, repitiendo cada uno ocho veces y dedicándoles apenas 10 minutos diarios de tu tiempo.
¡Atrévete!
Ve a tu gimnasio más cercano y toma una lección con un entrenador privado. Algunos lugares ofrecen este servicio antes de hacerte socia, y al consultar a un experto comprobarás que no es tan difícil comenzar un buen plan personalizado de ejercicios. Muchas se atemorizan de ello, pensando que están tan ‘fuera de forma’, ¡pero terminan sentadas en sus casas, engordando todavía más!
Desayuna y siéntete ligera
Es una comida vital que ‘echa a andar’ el metabolismo, da energía y regula la química del organismo después de 10 a 12 horas de ayuno. Es por eso que insistimos en la importancia de ingerirlo para mantener una buena nutrición y adelgazar de manera correcta si estás a dieta. Investigaciones científicas han comprobado que quienes no comen nada en la mañana engordan más que aquellos que sí lo hacen, y tienen niveles más altos de colesterol y glucosa. ¿Necesitas más razones para cambiar tus costumbres?
Vía: VANIDADES.