Debes estar plenamente consciente de que tener un miembro de cuatro patas en tu familia es para quererlo y cuidarlo durante toda su vida.
Habla con todos los miembros de la familia para saber que están de acuerdo en tenerlo.
Verificar que ninguno de los familiares que convivirán con él/ella presente algún tipo de alergias relacionadas con animales.
Informarte más sobre los gustos o preferencias que tenga el animal que desean adquirir.
Considera tener en cuenta el espacio suficiente para su desarrollo.
Busca con tiempo un veterinario cerca de tu casa.
Considera que cuentas con los recursos necesarios de tiempo, dinero y calidad humana para tenerlo. Aquí se incluye lo referente a educación, ya que de cachorros hay que enseñarles ciertas pautas de comportamiento.
Debes saber que deben tener una sana y balanceada alimentación, preferentemente con alimentos especializados, ya que los restos de comida casera puede resultar dañina para su sano desarrollo.
Vía: Padres e Hijos.