Viajar a Rajastán (o Rajasthan) supone sumergirse en un remolino vertiginoso de imágenes, sensaciones y recuerdos, una aventura emocionante a través de desiertos, templos, ciudades y lagos. La India eterna. Si este es tu destino de viaje, te ofrecemos una breve lista que resume todas las maravillas que allí te esperan y que de ningún modo deberías perderte:
- Jaipur: la capital de Rajastán, conocida como la “ciudad rosa”, con 3,4 millones de habitantes. Monumental y evocadora. Allí se encuentra el increíble Jal Mahal.
- Pushkar, a unos 100 km al oeste de Jaipur, ciudad santa famosa por su Templo de Brahma y su popular feria de dromedarios.
- Reserva de Tigres de Ranthambore, una de las más grandes del país (ver también: Ver tigres en la India).
- Udaipur, la magnífica ciudad del lago, con una arquitectura deslumbrante.
- Kumbhalgarh y Ranakpur, una antigua fortaleza junto a un santuario en lo alto de las montañas situadas al norte de Udaipur.
- Mount Abu, montaña mágica y techo de la región, a 1.200 metros sobre el nivel del mar.
- Jodhpur, la ciudad azul, considerada una de las más bonitas de la India.
- Jaisalmer, un destello dorado en el corazón del desierto de Thar.
- Thar, donde la naturaleza muestra su cara más pura y hermosa, aunque también despiadada.
- Shekhawati, la región que se sitúa en el centro del triángulo Bikaner-Jaipur-Delhi, en el norte de Rajastán, llena de encantadores pueblos.
Vía: Dónde Viajar.