Por desgracia, es bastante claro que las cosas comienzan a ponerse “olorosas” después de sólo dos días de omitir la ducha.
A mucha gente le gusta comenzar el día con una ducha, así tendrá un comienzo limpio y fresco. Y a final de cuentas es un buen hábito.
Claro que esto depende de muchas cosas, por ejemplo la piel de los bebés es muy sensible y no funciona igual que la nuestra. Sólo deben bañarse una o dos veces por semana.
El cuerpo está creando constantemente nuevas bacterias que viven en la piel. Existen alrededor de 1,000 diferentes tipos de bacterias, y 40 tipos de hongos, que viven en la piel. Esto puede sonar espantoso al principio, pero estas bacterias son buenas para nosotros y nos brindan salud.
Nuestras bacterias buenas trabajan para destruir otros microorganismos maliciosos, y cuando nos bañamos, básicamente añadimos una línea extra de defensa contra los patógenos a los que estamos expuestos diariamente. Cuando te saltas una ducha, básicamente estás creando un caldo de cultivo abierto para las bacterias. Lo que aumenta las posibilidades de desarrollar una infección bacteriana o fúngica.
Cuando nos duchamos, eliminamos todos los microbios dañinos que crecen en todo nuestro cuerpo durante todo el día. Incluso si estás haciendo un montón de actividad física, tu cuerpo sigue acumulando una pequeña capa de suciedad.
Por otra parte lavarse cabello es otra historia. La mayoría de las personas obtiene muchos beneficios de sólo lavarse el pelo dos veces por semana. Ahora ya lo sabes, deja que los aceites naturales tomen el control de vez en cuando es bueno para el cabello.
Vía: Muy Interesante.