Como tantos otros castillos españoles, el de La Mota fue construido sobre las ruinas de una antigua fortaleza árabe. Fueron arquitectos mudéjares los que, en el año 1440, iniciaron la construcción de las murallas, el foso y la formidable Torre del Homenaje, de 40 metros de altura. Si para el visitante de hoy, la visión de este espectacular castillo resulta imponente, hay que imaginar el efecto que debió causar en su día.
Cruzando el puente levadizo, se accede al recinto interior, limitado por las cuatro torres que se levantan en cada una de las cuatro esquinas del patio cuadrado. En ellas se ubican las bodegas, las cuadras y otros espacios del castillo. Uno de los lugares que más fascinan a los visitantes es el llamado Mirador de la Reina, la habitación favorita de Isabel I, cubierta por una bella bóveda policromada.
Cómo llegar: Desde Madrid, hay que tomar la autovía A-6, salida 157 Olmedo-Medina del Campo y seguir por la Cl-602. Al llegar al cruce con la calle Duque de Ahumada, girar a la izquierda y seguir las indicaciones hacia el castillo, que está abierto todos los días desde las 10 h de la mañana.
Vía: Dónde Viajar.