No se trata solamente de la carretera más espectacular de Noruega, sino de una de las más bonitas del mundo. Discurre de forma paralela a la costa con tramos zigzagueantes y atravesando hasta ocho puentes que conectan la cadena de islas que se encuentran entre Molde y Kristiansund, en la región de los fiordos noruegos más occidentales.
Si bien en invierno, a causa de las heladas y los temporales marinos, la carretera se cierra al tráfico en algunas ocasiones, en verano, cuando los días son más largos que nunca, la experiencia que ofrecen al viajero es fantástica. En esa época del año, los que viajan por la Carretera del Atlántico no sólo pueden disfrutar de un paisaje sensacional, sino que también tienen la oportunidad de avistar varias especies de aves así como focas y ballenas. Un regalo para los amantes de la naturaleza.
Otras carreteras panorámicas noruegas
En total, algo menos de 2.000 kilómetros de carreteras que serpentean entre montañas, fiordos, cataratas e incluso glaciares. Una maravillosa red de carreteras para descubrir la belleza, aún poco conocida, de este país situado en el extremo más septentrional de Europa.
Vía: Dónde Viajar.