Y por más irónico que suene, si no consumimos suficiente de ellas podemos tener dificultades para adelgazar y perder grasa abdominal. Pero esos no son los efectos más graves de una deficiencia de grasa, sino que también puede ser nociva para el rendimiento físico y mental.
Así que si creías que renunciar a la grasa era la clave exitosa para bajar de peso, todas estas explicaciones te demostrarán lo contrario:
#1 Te sientes más hambriento
Si no consumes suficiente de determinado macronutriente, terminarás buscando las calorías en otro lugar. Por lo general, aquellas personas que no comen la cantidad recomendada de grasas lo compensan aumentando su consumo de carbohidratos refinados.
Según un estudio del American Journal of Clinical Nutrition la grasa provoca que la absorción de alimentos sea más lenta. De esta manera, nos ayuda a permanecer saciados por más tiempo y evita que comamos en exceso.
#2 No proteges a tu corazón
Un estudio realizado por el New England Journal of Medicine comprobó que una dieta mediterránea con un consumo moderado de grasas tiene mayores beneficios para la salud del corazón y del sistema nervioso que una dieta con un consumo bajo o nulo de grasas.
Las grasas monoinsaturadas aumentan los niveles de colesterol “bueno” en el cuerpo y reducen el riesgo de sufrir cardiopatías.
#3 Tu cuerpo se inflama
Cuando no consumes suficiente grasa te pierdes de obtener sus grandes beneficios y uno de ellos es luchar contra la inflamación. Principalmente si excluyes las grasas polinsaturadas y ácidos grasos omega-3.
#4 Aumentas el riesgo de sufrir cáncer
Muchas personas consideran que las dietas “bajas en grasas” son las más efectivas para adelgazar. No obstante, muchos alimentos procesados que prometen ser bajos en su contenido de grasa contienen muchos aditivos artificiales para reforzar su sabor. Estos productos son muy nocivos para la salud y un estudio reciente de la Universidad de Georgia demostró que pueden incluso ser una causa de cáncer de colon.
#5 Deficiencia de vitaminas
Pero cuando el consumo de grasas es insuficiente, la absorción no puede realizarse y el nivel de dichas vitaminas en el cuerpo es bajo.
#6 Pones en riesgo tu sistema inmune
Como consecuencia de que la absorción de vitaminas disminuye, el sistema inmune también puede verse afectado por esto ya que la vitaminas D y E son las principales para el buen funcionamiento de las células inmunes.
Además, dos ácidos grasos esenciales (el omega-3 y el omega-6) también tienen un papel importante en la protección del sistema inmune.
#7 Descuidas tu salud mental
Muchos estudios en neurología han comprobado que una dieta mediterránea que incluye grasas saludables tales como el aceite de oliva, nueces y pescado pueden ayudar a preservar mejor la memoria y reducir el riesgo de enfermedades cognitivas.
Además, la grasa actúa como principal componente de las membranas de las neuronas y de la mielina, una capa que recubre los nervios y permite que se realice la sinapsis.
#8 Aspecto desmejorado
Las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas son muy beneficiosas para la piel, ya que las vitaminas E y K son las responsables de hidratar y proteger la piel, y sin un consumo suficiente de grasa es imposible absorberlas.
Y la deficiencia de omega-3 puede conducir a una inflamación de la piel, así como también aumentar el riesgo de acné y otras condiciones dermatológicas.
#9 ¿Y el período?
Las hormonas son las responsables de regular casi todas las funciones del cuerpo, y cuando no hay un consumo suficiente de grasa, estas pueden descontrolarse. Como consecuencia, en las mujeres puede desaparecer el período, ya que no se producen suficientes hormonas sexuales como consecuencia del bajo porcentaje de grasa corporal.
#10 Fatiga y bajo rendimiento
Si tu cuerpo no obtiene la cantidad de grasa que necesita comenzará a manifestarlo por diferentes caminos. Pero el más notorio para ti posiblemente sea la falta de energía que sentirás, tanto para practicar deporte como para concentrarte o realizar adecuadamente tu trabajo.
#11 Aumento de peso
Y si tu objetivo al eliminar las grasas de tu dieta era perder peso, debes saber que no estás yendo por el buen camino. La grasa es un nutriente muy importante para tu organismo y si no recibe suficiente de él puede tener el efecto contrario del que deseas.
Además, el omega-3 ayuda a reducir el almacenamiento de grasa abdominal y prevenir que comas en exceso.
Dicho todo esto, no cabe la menor duda de que las grasas son totalmente necesarias para el adecuado funcionamiento de nuestro organismo y que jamás podemos privarnos de ellas (salvo excepciones donde exista una condición de salud específica). No hay por qué temerles, atrás quedó el mito de que para adelgazar necesitábamos eliminarlas de nuestra vida ¡todo lo contrario!
Lo más importante es mantener una alimentación equilibrada y completa, es decir, que incluya todos los grupos alimenticios.
Por: Camila Mendoza
Vía: iMUJER.