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Jennifer López siempre es un blanco fácil del "slutshaming" en alfombras rojas. Sobre todo, porque adora mostrar sus atributos con transparencias y nunca ha variado la fórmula. Y realmente eso no le importa mucho.
Ha sabido que desde el comienzo de su carrera, tenía un plus que ninguna estrella de su época poseía en el momento: curvas. Las curvas que la hacen hoy una latina exuberante y que la hicieron pionera- antes que las Kardashian- en mostrar un atributo muy celebrado: su trasero.
Pero antes de que otros cuerpos fueran aceptados en Hollywood, ella era constantemente parodiada por su atributo. Howard Stern o por ejemplo, el programa de MTV "Celebrity Deathmatch", se burlaron ampliamente de ella. En el programa animado, ella competía contra Dolly Parton. Al final ganaba ella.
Asimismo, una canción de Ilia Kuryaki and The Valderramas, llamada Jennifer del Estero, se refería vulgarmente hacia la artista.
Hacer de tu singularidad tu mejor virtud
Poco a poco, eso fue cambiando. Y López, aparte de sus capacidades actorales, tomó este atributo como bandera en sus videos de comienzo de milenio. Incluso lanzó un single llamado "Booty". Afirma que les abrió el camino a otras famosas que también tienen curvas.
Por eso en Instagram, lo demuestra, así como su sensualidad. De hecho, la "Diva del Bronx" comparte en su red social cómo el erotismo hace parte de su personalidad y cómo tiene actitud a pesar de lo que le digan. En su último post tiene un atuendo sugerente y se mueve cadenciosamente. Ella se detiene cuando se percata de que es grabada.
Esto lo hizo Loren Ridinger, una amiga de la cantante y actriz. El post ya tiene más de 7 millones de reproducciones.
Vía: NuevaMujer.