Cuando un adulto levanta a un bebé al tomarlo de la mano o del brazo, puede causarle una dislocación del codo que en inglés se conoce como nursemaid's elbow (codo de niñera). Es una de las lesiones más comunes en niños de uno a tres años, aunque puede ocurrir desde los seis meses hasta los siete años.
Cuando un pequeño sufre esta lesión puede sentir un intenso dolor, llorar incontrolablemente y dejar de usar el brazo lastimado. En el hospital, después de examinarlo, el especialista puede volver a poner el codo en su lugar con una maniobra especializada (NUNCA intentes acomodarlo tú solo), con lo que el dolor casi siempre desaparece y el niño vuelve a la normalidad.
Vía: ActitudFEM.