Desde mucho antes que Cleopatra nublara los sentidos de Marco Antonio con sus irresistibles encantos, el ser humano se ha rendido ante el poder de esa atracción poderosa que llamamos sex appeal. Y aunque casi todos coincidimos con ciertos estándares de belleza universales, como un cabello sedoso o unos músculos supertonificados, la realidad es que el papel que desempeña la belleza física es solo una parte de ese factor misterioso. ¿Dónde radica la clave? Cada día se aclara más el enigma, pues tres nuevos estudios realizados en Estados Unidos revelan los secretos del sex appeal. Y te aseguramos que ¡hay sorpresas!
REVELACIÓN # 1: UNA CUESTION ANTROPOLÓGICA
A través de su investigación sobre el cerebro y la atracción
sexual, la antropóloga biológica estadounidense Helen Fisher ha encontrado que ciertos sistemas bioquímicos desempeñan un rol muy importante en lo que hallamos sexy. De acuerdo con Fisher, otros factores ajenos a la apariencia física son determinantes cuando conocemos a alguien:
- Las personas regidas por la dopamina, que son espontáneas, audaces y aman la adrenalina, tienden a atraer a las que son guiadas por la misma hormona.
- Las que son regidas por la serotonina, que son convencionales y metódicas, se sienten atraídas por gente como ellas.
- Aquellas que son guiadas por la testosterona o el estrógeno tienden a atraerse entre sí, ya que buscan una contraparte que las complemente. Vale aclarar que no todos los hombres son regidos por la testosterona y no todas las mujeres por el estrógeno. Por ejemplo: cuando ella es una mujer alfa (testosterona) y él es un hombre “sumiso” (estrógeno), el resultado es una unión que desde afuera se ve desigual, pero que funciona para ambos, pues se complementan a nivel hormonal.
Lo interesante y maravilloso de la biología humana es que toda esta “información” es transmitida y recibida en los primeros minutos de conocer a una persona. Es por eso que en algunos casos la atracción es, literalmente, fulminante e instantánea.
REVELACIÓN # 2: LA COMPATIBILIDAD BIOLÓGICA
Una investigación que duró 20 años, realizada en Estados Unidos, utilizó las pruebas de ADN para determinar la compatibilidad neurológica y biológica de las parejas. Y ¿sabes qué se descubrió? Que los genes del sistema inmunológico, también conocidos como antígenos leucocitarios humanos (HLA, por su sigla en inglés), desempeñan un papel importante en la atracción sexual.
De acuerdo con los investigadores, la composición genética de nuestro sistema inmunológico varía de persona a persona. Pero esto es lo interesante: mientras más diferentes son los genes de esa persona de los propios, más atractiva la hallamos. Esto se conoce como “compatibilidad biológica”.
Apostamos a que te estás preguntando de qué manera determinamos si nuestros genes son compatibles con los de otra persona. ¿Ocurre por arte de magia o por transmisión de pensamiento? La respuesta es muy sencilla: estos genes contribuyen al olor corporal, que es único y distintivo en cada uno. Es por eso que Ana es capaz de enamorarse perdidamente de Juan porque él “huele rico”. Al menos para ella. Y por la misma razón, Brenda, que no se siente atraída por el aroma natural de Juan, no entiende lo que Ana “ve” en él.
REVELACIÓN #3: EL PODER DEL... ¿OÍDO?
Ya hemos visto que las hormonas y el olfato tienen un rol determinante en lo que hallamos sexy. Pero no hay que olvidar un sentido muy poderoso. Y no hablamos de la visión. Sí, es cierto que la belleza física estimula los centros de placer del cerebro, pero no olvides el oído.
Cierra los ojos y “escucha” la voz profunda de Harrison Ford o la más suave y aterciopelada de Alejandro Sanz. Ahora imagina que esas voces te susurran palabras de amor al oído. ¿No es cierto que te emocionas y hasta te recorre el cuerpo una sensación muy placentera y, seamos honestas, muy sexy? Está científicamente comprobado que el sex appeal también entra por el oído. Es por eso que durante siglos la música ha sido usada para provocar diferentes emociones y estados de ánimo, y para estimular los recuerdos. Debido a esto el sonido de la voz puede ser un afrodisíaco… o todo lo contrario: a veces una persona es considerada atractiva... “hasta que abre la boca”.
Por supuesto, lo que sale de esa boca también es vital para el romance, ya que un estudio llevado a cabo por un sitio social de Internet halló que el carácter de la persona —su inteligencia, sentido del humor y nivel de autoestima— contribuyen a su atractivo total. Y esto es lo mejor: mientras más tiempo pasas junto a esa persona, y más conoces su personalidad, más atraída puedes sentirte por ella, independientemente de su look.
DE LA TEORÍA A LA REALIDAD
Sin duda, el sex appeal es algo único, fascinante y complejo que no se puede fabricar. La moraleja que nos dejan estos estudios es que sí, la belleza atrae, pero finalmente no determina qué es lo que hallamos sexy. Es por eso que las mujeres realmente atractivas no se miden por los estándares de belleza culturales ni tratan de imitar a las modelos del momento. Ellas se dedican a ser la mejor versión de sí mismas. Y eso sí es sexy.
Por: G.B. Hernández
Vía: VANIDADES.