Se trata de un nuevo estilo de vida que ha logrado imponerse entre los ejecutivos y trabajadores estadounidenses. De manera oficiosa el invento es de una mujer llamada Marian Thier, obligada a realizar continuos viajes-relámpago entre Estados Unidos y distintos destinos del mundo. Harta de esa vida, decidió añadir un par de días de vacaciones a sus siguientes viajes a fin de poder explorar cada lugar que visitaba y de paso relajarse un poco de la rutina de viajes y trabajo.
Así es el Bleisure, palabra que nace de la combinación de otras dos palabras: Business + Leisure. En una encuesta de viajeros internacionales publicada el año pasado en Estados Unidos, el 60% afirmó haber sumado uno o más días extras a su viaje de negocios, y la tendencia sigue al alza.
Lo mejor del Bleisure es que se puede practicar sin necesidad de viajar solo. De nuevo según el estiudio antes mencionado, más de la mitad de estos viajeros se llevan con ellos a su pareja, un familiar o un amigo. Esa es la fómula para convertir un viaje de trabajo en una experiencia memorable.
Vía: Dónde Viajar.